En el libro de ideas del día de hoy, te presentamos una propuesta residencial moderna que acomoda en ambientes amplios -y en franco contacto con el interior- el programa de necesidades de una familia compuesta por un matrimonio de profesionales con hijos preadolescentes.
La casa—obra del estudio Family Houses- se organiza a partir de una tipología compacta en dos niveles, y se localiza en el barrio privado bonaerense de San Isidro.
El estudio cuenta con 22 años de experiencia en el desarrollo de proyectos residenciales, comerciales e ingenieriles, cuya obra incorpora criterios de eficiencia energética que mantienen su valor en el tiempo.
La imagen exterior de la vivienda, se define a partir de una estética moderna casi minimalista, que se traduce en una composición prismática asimétrica cuyas aristas vivas se recortan sobre el paisaje urbano circundante.
La obra se concreta a partir de un intercambio continuo con los clientes para conocer sus anhelos y preferencias para crear una vivienda 100% disfrutable y a medida. Según consta en la web oficial del estudio, la premisa general que guía el proceso de cada obra es la estrecha relación entre los siguientes elementos: entorno-naturaleza-diseño.
Si estás pensando en darle nueva vida a ese ambiente ocioso de tu hogar, te invitamos a recorrer los detalles de esta propuesta residencial suburbana con impronta minimalista.
La fachada más pública de la casa se concreta a partir de una composición prismática asimétrica que presenta una escala adecuada, estableciendo una relación armónica y equilibrada con su entorno.
La estética minimalista que orienta el diseño exterior como interior de la caja arquitectónica, se caracteriza por la ausencia de elementos superfluos o innecesarios, que en este caso utiliza un tono más oscuro de revestimiento exterior, para destacar detalles y el volumen más alto de la composición que corresponde a la caja de escalera.
El garaje se define a partir de un semicubierto –en franco contacto con la calle- que puede acomodar hasta dos vehículos. El ingreso principal a la vivienda, se jerarquiza a partir de un solado escalonado y un pequeño alero que lo protege de la incidencia directa del sol y la lluvia.
Otra vista exterior desde la calle, nos muestra la fachada posterior de la vivienda que se expande visual y espacialmente hacia el jardín posterior. Una amplia galería en planta baja, define un balcón-terraza en el nivel superior, como expansión exterior del sector íntimo. Así, con este gesto los autores generan un espacio abierto –más privado- para el disfrute de los usuarios.
Como puede observarse, la vivienda se diseña sobre una de sus medianeras liberando la opuesta para generar una circulación abierta dentro del lote y generar mayor privacidad desde la calle.
El espacio social en planta baja, se expande visual y espacialmente hacia el exterior por medio de un semicubierto o galería que puede utilizarse los 365 días del año. Próxima a este espacio se ubica la piscina que puede percibirse desde diferentes ambientes interiores de la casa.
La galería cuenta con un asador para ser utilizada a modo de quincho o living exterior que, mediante la colocación de cerramientos laterales móviles puede disfrutarse durante todo el año. Este recurso denominado comercialmente como cerramientos en PVC cirstal o toldos verticales son ideales para aplicar además en balcones sin sacrificar la luminosidad del ambiente, aislándolo del frio y del viento exterior.
La última imagen que te presentamos de esta obra es un detalle del ingreso. Puede señalarse el diseño del solado que acompaña la volumetría de la casa y el proyecto cuidado de paisajismo que utiliza arbustos para ocultar la cerco perimetral de madera.
Las aberturas de la casa se disponen de acuerdo a dos criterios: uno procura ganar intimidad desde la calle, y el otro; dirigir la mirada hacia diferentes sectores del paisaje para que el recorrido cotidiano de la casa se enriquezca con sus postales.