10 trucos para planchar menos (¡y ahorrar tiempo!)

Isabel Rodríguez Isabel Rodríguez
Cocina con Lavadero, Virginia Sánchez Virginia Sánchez Kitchen
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Una casa es algo más que un espacio en el que retirarnos a descansar. En el interior del hogar acontecen multitud de escenas que tienen que ver con el devenir diario y, en este contexto, las tareas domésticas no son ajenas a nadie que haya apostado por la vida independiente. Desde cocinar a limpiar el polvo, pasando por organizar los espacios, barrer o sacar brillo a las ventanas, existe un amplio catálogo de labores que despiertan tanta admiración como rechazo. Y no es de extrañar. Si tenemos en cuenta que este tipo de tareas suelen ocupar buena parte de nuestro tiempo libre, no está de más poner en práctica ciertas recomendaciones que puedan facilitarnos nuestro cometido.

La plancha ocupa un lugar destacado en la hoja de ruta del día a día y, unos con más acierto que otros, han de enfrentar la tarea para lucir un aspecto digno en una reunión de trabajo, una cita importante, un evento familiar, una reunión de padres… Si cada vez que acontecen este tipo de situaciones tiemblas sólo de pensar en sacar la tabla a pasear, estás en el lugar indicado. En este libro de ideas te proponemos 10 trucos fantásticos para planchar menos y ahorrar tiempo. ¡Toma nota!

Cada cosa en su lugar

Tener un cuarto de lavado apropiado puede resultarte muy útil a la hora de limitar tiempo y esfuerzo en la tarea de planchar la ropa. Si además de la lavadora, incorporas en tu área de lavandería un espacio para colgar tus prendas y una tabla de la plancha totalmente equipada, reducirás notablemente las molestias derivadas del proceso en sí. Bien pensado, se trata de tener todo en uno o, lo que es lo mismo, reducir paseos de la cocina al tendero y al cuarto de la plancha y viceversa.

Las perchas, grandes aliadas

Planchar es una de las tareas más tediosas a las que hay que enfrentarse en un momento u otro de la semana. Sin embargo, la cosa es mucho más sencilla si pones en práctica un truco tan fácil como práctico. Cuando vayas a sacar la ropa de la lavadora, utiliza perchas para colgarla. Si no la dejas demasiado tiempo dentro del tambor y, además, la colocas cuidadosamente en el soporte apropiado, evitarás arrugas innecesarias y, en muchos casos, te ahorrarás tener que planchar camisas, camisetas, pantalones o vestidos. 

No olvides tu ropa

¿Quién no ha sentido en algún momento la tentación de ir acumulando ropa sucia en la lavadora hasta que llega el momento de ponerla en marcha? ¿O te has marchado de casa dejando un programa puesto y al final lo que iba a ser un café rápido se ha convertido en una tarde noche de café, cena, copas y churros? Error. La lavadora no es un cesto para guardar tu ropa y, mucho menos, si está mojada. 

Si quieres planchar menos y ahorrar tiempo, procura tener un recipiente adecuado para no apelotonar tus prendas hasta que llegue el momento de lavar y, si ya has puesto la lavadora ¡espera a tenderla antes de salir para evitar que se arrugue y coja olores!

Ojo con el centrifugado

Hay quienes tienden a creer que centrifugar la ropa varias veces o a muchas revoluciones puede reducir los tiempos a la hora de tenerla lista para un nuevo uso. Nada más lejos de la realidad. Es posible que, en épocas de mal tiempo, reducir la humedad de tus prendas permita que se sequen más rápidamente pero, en lo que a planchar se refiere, es contraproducente. Cuanto más rápido sea el centrifugado más arrugada saldrá la ropa y, en consecuencia, más tiempo tendrás que invertir en planchar así que ¡ojo con abusar del centrifugado!

Si no te queda más remedio que apostar por fórmulas automáticas de secado, te recomendamos que, siempre que tengas espacio en casa, apuestes por una secadora para planchar menos y ahorrar tiempo.

Productos naturales

Otro de los trucos sencillos que puedes poner en práctica para planchar menos y ahorrar tiempo es apostar por productos que te ayuden a eliminar las arrugas antes de tener que sacar la plancha. Aunque en el mercado existen determinados preparados que, con un sencillo golpe de aerosol pueden ayudarte en la tarea, los productos naturales son tanto o más efectivos y, generalmente, más económicos. 

El vinagre, por ejemplo, es todo un clásico entre los duchos en la materia y es que, añadiendo un pequeño chorro de este líquido agrio y astringente en el apartado del suavizante, conseguirás unos resultados fabulosos y, lo mejor de todo, el olor se va con el secado. 

Organiza bien el armario

Tener un buen armario no siempre es una garantía de que tus prendas estén en perfecto estado, de hecho, el mismo dependerá, en buena medida, del uso que hagas de esta pieza de mobiliario. Al guardar tu ropa procura colocar las prendas más delicadas y aquellas de menor peso en la parte superior y, por supuesto, evita doblarla recién planchada para evitar que el calor marque los pliegues. 

Recuerda que si planchas tu ropa según la recojas de la cuerda limitarás los riesgos de que se arrugue antes de emprender la tarea y, si además comienzas cuando la misma está aún un poco húmeda, el esfuerzo para eliminar las arrugas será menor.

La ducha, un espacio por explorar

¿Sales habitualmente de viaje y las condiciones propias de tu partida no siempre te permiten llevar una plancha de mano en el bolso o, sencillamente, no puedes perder tiempo en devolver a tus prendas el esplendor que tenían antes de entrar en la maleta? Entonces este truco para planchar menos y ahorrar te va a encantar. 

La idea es aprovechar el vapor de agua de la ducha para eliminar las arrugas de las prendas más finas. Seguramente no puedas 'adecentar' una americana o unos pantalones de pinzas, pero si se trata de una camisa o una blusa, el vapor hará que la prenda gane peso y se estire. ¡Bye, bye arrugas!

Ahorrar algo más que tiempo

Los trucos a la hora de planchar no tienen por qué limitarse únicamente a reducir los tiempos o el esfuerzo a dedicar, de hecho, hay ciertas recomendaciones que puedes poner en práctica y que te permitirán ahorrar en la factura de la luz. Esperar a que la plancha alcance la temperatura ideal es poco práctico y, además, supondrá un gasto que puedes optimizar fácilmente. Aprovecha mientras coge calor para ir atacando las prendas menos arrugadas y, cuando estés llegando al final, desconecta el aparato y termina la tarea con el calor residual. 

Si echa cuentas a final de mes, verás que te sale más rentable planchar una hora a la semana que un cuarto de hora cada día. 

Tu plancha, siempre a punto

El estado en el que se encuentra la ropa es un factor clave a la hora de determinar el tiempo que te llevará la tarea doméstica que nos ocupa. Sin embargo, uno de los trucos para planchar menos y ahorrar tiempo tiene que ver con el estado de la plancha en cuestión. Al igual que mantienes tus herramientas de trabajo en perfecto estado, deberás tener la plancha siempre a punto para desarrollar la tarea en las mejores condiciones y el menor tiempo. 

Límpiala con un poco de bicarbonato y un trapo para que su potencia no se resienta con el paso del tiempo y verás cómo habrás de invertir menos esfuerzo.  

Ayuda profesional

El ritmo de vida actual no siempre permite que dediquemos todo el tiempo y energías que nos gustaría a las tareas domésticas entre las que, nos guste o no, planchar ocupa un lugar imprescindible. Tanto es así que, si no estás dispuesto a sacrificar ni un sólo minuto de tu tiempo libre en pro de cumplir con esta obligación ¿por qué no recurrir a un profesional? Siempre que lo necesites, ahorrarás tiempo y esfuerzo llevando tus prendas más delicadas a la tintorería. Original ¿no?

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