Un oasis en pleno centro de Malasaña

María Bausán María Bausán
Apartamento en Malasaña, CARLA GARCÍA CARLA GARCÍA Living room
Loading admin actions …

Comprar una vieja vivienda en Madrid y reformarla con sus propias manos para convertirla en su oasis personal era el sueño de la interiorista Carla García. La búsqueda de ese rincón que hacer propio terminó el día que se cruzó en su camino un piso de 60 metros cuadrados en el castizo barrio de Malasaña. Su alargada geometría convertía la reorganización y redistribución de esta vivienda en un auténtico reto, que fue superado a la perfección con una dosis de creatividad y buen gusto. Hoy en día lo que en su tiempo fue una vieja casa con olor a naftalina es un espectacular piso de alquiler vacacional, donde la funcionalidad y una estética cuidada y repleta de belleza conviven a la perfección. Descubrimos paso a paso la sorprendente transformación. 

Antes: una casa que era un pasillo

Una fachada de apenas 3 metros esconde una casa que se distribuye de manera longitudinal con una elevada superficie de pasillos. Antes de la reforma, la casa se dividía en pequeñas estancias poco funcionales, muchas de ellas estancas, lo que convertía la vivienda en un agujero oscuro y mal ventilado. Reorganizar y cambiar toda la distribución, para conseguir hacer más funcional y acogedora la casa, fue el principal caballo de batalla de la reforma. La clave: los espacios diáfanos e interconectados. 

Después: continuidad y comunicación

La entrada de la vivienda partía esta en dos. A este lado, se sitúa la zona que da a fachada y que estaba compuesta del salón y una habitación adicional. Esta mantendrá la conexión con el salón, pero abriéndose al pasillo a través de unos estores de fibras naturales que pueden correrse para mantener la intimidad de la habitación de invitados o abrirse para incluir el área del pasillo. 

La habitación de invitados

Además de con el pasillo, esta habitación está conectada a través de una puerta vidriada con el salón y, lo que es más importante, con la única ventana que da a la calle. Antes de la reforma, la habitación presentaba unas paredes revestidas con un papel pintado pasado de moda que no hacía sino oscurecer más aún la habitación. Ahora, se ha optado por elegir el color blanco para iluminar esta habitación interior.

Antes: un salón al estilo cuéntame

Uno de los aspectos más llamativos de la vivienda antes de la reforma era los papeles pintados que había en casi todas las habitaciones. Un papel de pared con un estilo totalmente desfasado y que no hacía sino envejecer aún más la vivienda. Uno de los principales trabajos a la hora de reformar, fue quitar las múltiples capas de papel que se habían ido acumulando a lo largo del tiempo. Esta habitación que vemos en la fotografía es la única que daba a fachada, por lo que sacarle partido era obligatorio. 

Ahora: un salón lleno de luz

La transformación es sencillamente espectacular. La luz ha entrado de pleno en esta habitación de cuidado diseño, donde predomina el blanco, pero se han repartido pinceladas de color en algunos textiles y, sobre todo, en el cuadro que preside la habitación y que es obra de la propia Carla García. 

Uno de los elementos más llamativos es el suelo. La reforma recuperó algunos de los elementos estructurales más atractivos de la vivienda, entre ellos el pavimento de barro que le da un encanto a especial a la casa. 

Antes: una zona de paso

La estrechez de la planta hacía inservibles muchos de los espacios, convirtiéndolos en habitaciones de paso, donde a pesar de la búsqueda de funcionalidad, se creaban rincones que no invitaban a estar. La ventana que vemos da a un patio de luces.

Después: un estudio muy creativo

Ese desaprovechado rincón pasa ahora a convertirse en un bonito estudio que parece invitar a la creatividad. El detalle más llamativo es la hamaca que cuelga de punta a punta de la habitación y que se convertirá en el mejor lugar donde dejar reposar las ideas. 

Antes: una habitación intermedia

Más papel pintado de la época de Matusalén encontramos en una pequeña habitación intermedia que precedía a otros dos cuartos sin iluminación natural. Para aprovechar bien el espacio y en especial la ventana, se tiraron tabiques para ampliar la habitación y poder convertirla en lo que será la cocina de la casa. Veamos el cambio.

Ahora: una cocina llena de encanto.

Al tirar tabiques y unir habitaciones, el espacio que queda permite crear una cocina con office donde no falta ni un solo detalle. La cocina no se ha concebido como un lugar solo para cocinar, sino más bien como el alma de la casa, donde pasar sin transiciones de un desayuno copioso a un aperitivo y de este a una comida entre amigos. La cocina es el lugar de encuentro, donde ponerse cómodo en una de las dos butacas, y apreciar la belleza de los detalles: los cuadros en las paredes o la baldosa de cerámica hidráulica que reviste la zona de los fogones.

Antes: la cocina con baño separado en dos partes

Llegamos al final de esta alargada vivienda. El apartamento termina en otro patio de luces que corta en dos la planta, creando dos habitaciones muy pequeñas que antes componían un cuarto de baño fraccionado. 

Ahora: un cambio de distribución importante

El baño sigue fraccionado, pero ahora precede a la habitación final, que es el dormitorio principal de la vivienda. Por un lado, esta posición, tan alejada de la calle, lo convierte en el rincón más tranquilo y apacible de la casa. Uno de los espacios que había en torno al patio de luces se ha convertido en el vestidor. Por otro lado, y aunque aquí no puede apreciarse, una pared con pavés separa la habitación del baño, permitiendo iluminar este. Un suelo de baldosa hidráulica recuperado marca los límites del aseo, mientras que el dormitorio es la única habitación que utiliza la madera en el pavimento, eso sí, coloreado. 

Con esta imagen terminamos este recorrido por este impresionante apartamento vacacional en Malasaña. Si quieres leer más sobre viviendas donde pasar las vacaciones, te recomendamos el artículo Una panadería del siglo XIX convertida en apartamentos vacacionales.

Need help with your home project?
Get in touch!

Highlights from our magazine