En numerosas ocasiones os hemos hablado de reformas. Nos centramos sobre todo en reformas de cuartos de baño y de cocinas ya que son las rehabilitaciones más espectaculares y, en general, las más integrales que existen. En lo que respecta a dormitorios y salones, por lo general lo único que cambiamos son los muebles y los textiles pero pocas veces construimos o tiramos piezas de gran tamaño. Hoy, sin embargo, os traemos una reforma como es debido, donde se han ganado metros de más gracias a un altillo y donde varios elementos han sido renovados por completo. Todo ello de la mano de los decoradores de interiores Bervic.
Si queréis ganar espacio en vuestro dormitorio y no sabéis como hacerlo estad atentos a esta reforma y, con cinta métrica en mano, preguntaros si algo así sería posible también en vuestra vivienda. Comenzamos.
En esta primera fotografía en blanco y negro os mostramos el estado anterior de la habitación. En ella observamos un basto cuadrado blanco que además de restar espacio quita ligereza al diseño de la estancia. El objetivo de la transformación era eliminar este elemento y convertirlo en algo mucho más funcional, en un altillo que añadiera un área nueva a este dormitorio.
El apartamento que os mostramos hoy se encuentra en un edificio de 150 años en el barrio de Sant Andreu (Barcelona). Los elementos arquitectónicos originales como las vigas de madera se han mantenido y crean una fantástica cubierta que ayudará a calidecer la atmósfera dentro del dormitorio. Entre los elementos contemporáneos destacan la pizarra negra del pavimento y los escalones que ascienden, con la textura desgastada de su plancha de acero, hasta el altillo.
Las dos paredes del antiguo vestidor han sido aprovechadas para dar vida al nuevo elemento del que ya os hemos hablado: el altillo. Su estructura de hierro en acabado óxido natural, el suelo y los escalones hechos a partir de madera de roble maciza acabada al olio bianco y, por último, su magnífico armario de puertas correderas con luz LED integrada, son los componentes de esta nueva habitación. Mucho más ligera que en la fotografía del antes y también, mucho más estilosa con un diseño atemporal y a la vez cálido.
En vez de colocar la cama en la nueva altura se ha decidido dejarla en el piso de abajo. Esta obra no quiere conseguir espacio para una litera ni dificultar el acceso a la cama, por eso se reserva el mejor lugar de la estancia para el mueble principal. El cabecero es el elemento que más llama nuestra atención, pero la estructura de madera en color blanco desgastado nos recuerda que uno de los objetivos era aprovechar el espacio. Así, con esta sencilla pieza se sacan metros cuadrados de lugares inimaginables.
Cualquier rincón del piso esconde un detalle u objeto digno de observar. En esta imagen apreciamos el detalle al final de la barandilla de la escalera. Desde esta perspectiva observamos con mayor precisión las puertas del nuevo armario, la cara inferior y superior del altillo, además de intuir la nueva finalidad de este espacio.
Subimos por la escalera para descubriros la nueva estancia de este dormitorio. Un estudio cálido con un toque de estilo industrial se coloca bajo las vigas de madera sobre la cubierta de roble. Una sencilla decoración es suficiente para crear un rincón magnífico, quien sabe la clase de novelas extraordinarias que pueden surgir en un lugar como este…